La edad es un factor de elevada importancia a la hora de planear un embarazo, las posibilidades de quedarse embarazada de una mujer disminuyen a partir de los 32 años de manera progresiva, aumentando a su vez los riesgos tanto para la madre como para el feto, por lo que es de vital importancia poner en conocimiento de la madre su estado ovárico.
La hormona antimulleriana es una proteína que es secretada por los folículos ováricos y nos sirve como medida indicativa de la reserva de la función ovárica, y por tanto útil para la detección de algunas enfermedades como el ovario poliquístico y el fallo ovárico prematuro.